La Relación con el Mundo


Muchas veces la gente, después, generalmente, de experiencias negativas, intenta establecer vínculos con el mundo, lazos positivos, que le ayudan a seguir adelante. Son como reafirmaciones de la existencia, puntos de estabilidad en un mundo caótico, dentro de ese miedo al movimiento constante de quien ha sufrido.

Contrario a esto como llegada a la felicidad, pienso que estos lazos positivos no son más que una afirmación previa a la misma, ya que la paz absoluta no requiere de lazos con el cosmos: más aun, los desecha. Un ser sin ningún lazo ficticio puede navegar por el universo cual energía en una nube electrónica. No significa esto que no tengamos lazos con el mundo: somos el mundo, junto a todo. La consciencia de esto sólo se da cuando somos libres, libres de volar, libres de deshacernos y sublimarnos en el aire (doble connotación artística-física de la palabra).

Suena muy volado, pero es lo contrario, es lo más concreto que existe.