M: Y… de última, si lo ves así, son más ecológicos los que venden en parque Saavedra los zapatos usados del tío. ¿Qué es más ecológico, un zapato de goma o uno de suela de madera? Lo más ecológico es uno usado… Lo que deberías escribir también alguna vez es sobre lo del principito.
S: ¿El Principito? ¿Qué tiene que ver con la ropa?
M: ¡Lo del payaso! El payaso que escribe cosas de matemática en el pizarrón… pero como está vestido de payaso, no se puede tomar en serio lo que dice. Si estuviera vestido de profesor, o… es como el dicho “el hábito hace al monje”, que depende de cómo estés vestido. Pero también está el de la mona, ¡son dos dichos re contradictorios!
S: ¿Eh?
M: Está el de “el hábito hace al monje” y el de “aunque la mona se vista de seda”...
S: Obvio, tiene que haber dos dichos contradictorios, para que las dos personas de la conversación tengan algo que decir. Jajaja, me imaginé dos personas gritándose la una a la otra. Uno diciendo “¡MONA ES Y MONA SE QUEDA!” y el otro “¡EL HÁBITO HACE AL MONJE!”, desaforadamente.
M: “AUNQUE LA MONA…” Jajaja, es verdad.
S: Sí, igual son dos cosas diferentes, porque el de la mona se trata más sobre la naturaleza, de la mona. O sea, su naturaleza es tan fuerte que supera la vestimenta.
M: No, claro, pero el del monje dice también que el hombre es definido por el hábito, como que la naturaleza se define por la ropa que tiene. Es más una cuestión de uniformes, como que se aplica a eso. El de la mona, puede ser, también, creo que se asocia más a una cuestión de clase, como que si no sos de cierto… linaje, por más que te vistas de princesa, no tenés modales, sos una mona igual.
S: Sí, puede ser, si tenés la cara peluda.
M: En cambio el otro dicho es más eso… algo como de uniformes. Si viene un médico vestido de fútbol o vestido de jogging y zapatillas, no sé si te gustaría que te atendiera… en cambio si te atiende un médico como el que nos atendió la otra vez… ¡te encanta!
S: ¡Ay, mamá! Sos una babosa… Debería conseguir una grabadora, para grabar estas conversaciones.
S: ¿El Principito? ¿Qué tiene que ver con la ropa?
M: ¡Lo del payaso! El payaso que escribe cosas de matemática en el pizarrón… pero como está vestido de payaso, no se puede tomar en serio lo que dice. Si estuviera vestido de profesor, o… es como el dicho “el hábito hace al monje”, que depende de cómo estés vestido. Pero también está el de la mona, ¡son dos dichos re contradictorios!
S: ¿Eh?
M: Está el de “el hábito hace al monje” y el de “aunque la mona se vista de seda”...
S: Obvio, tiene que haber dos dichos contradictorios, para que las dos personas de la conversación tengan algo que decir. Jajaja, me imaginé dos personas gritándose la una a la otra. Uno diciendo “¡MONA ES Y MONA SE QUEDA!” y el otro “¡EL HÁBITO HACE AL MONJE!”, desaforadamente.
M: “AUNQUE LA MONA…” Jajaja, es verdad.
S: Sí, igual son dos cosas diferentes, porque el de la mona se trata más sobre la naturaleza, de la mona. O sea, su naturaleza es tan fuerte que supera la vestimenta.
M: No, claro, pero el del monje dice también que el hombre es definido por el hábito, como que la naturaleza se define por la ropa que tiene. Es más una cuestión de uniformes, como que se aplica a eso. El de la mona, puede ser, también, creo que se asocia más a una cuestión de clase, como que si no sos de cierto… linaje, por más que te vistas de princesa, no tenés modales, sos una mona igual.
S: Sí, puede ser, si tenés la cara peluda.
M: En cambio el otro dicho es más eso… algo como de uniformes. Si viene un médico vestido de fútbol o vestido de jogging y zapatillas, no sé si te gustaría que te atendiera… en cambio si te atiende un médico como el que nos atendió la otra vez… ¡te encanta!
S: ¡Ay, mamá! Sos una babosa… Debería conseguir una grabadora, para grabar estas conversaciones.